2) Ají.
Constituye una fuente muy importante de vitamina C si se consume crudo. Además aporta betacarotenos, algo de hidratos de carbono de absorción lenta y fibra. Otras hortalizas que aportan vitamina C son el tomate, el repollo y la espinaca, sin cocinar.
Los ajíes más picantes, llamados chiles o chilis, aportan una sustancia que podría ser preventiva de algunos tipos de cáncer, especialmente de estómago. Cuanto más picante es el Chile, mayor es el contenido de esa sustancia, de modo que se recomienda incluirlos entre los alimentos habituales, si se tolera el picante.