Las deshidratación de frutas y verduras es un método muy fácil para conservar alimentos. Se usan temperaturas bajas, no superiores a 70º C para que conserven sus propiedades nutritivas. El mejor método es al sol. Si los alimentos están bien deshidratados pueden conservarse varios meses en recipientes herméticos.
Si se usa el horno para deshidratar hay que dejarlo abierto para que la humedad salga fácilmente y se acelere el proceso de deshidratación