Cepillo de dientes
Al cepillo de dientes hay que tenerle mucho respeto, ya que puede ser un foco de gérmenes, incluyendo aquí bacterias intestinales y gérmenes fecales. Es importante también en qué lugar se guarda y cómo se guarda, hay que tener en cuenta los microorganismos de las cerdas que después van a entrar en la boca.
En la cavidad oral viven cientos de distintos microorganismos que se pueden transferir al cepillo de dientes durante el uso. Algunos de ellos son estafilococos, bacterias coliformes, pseudomonas, levadura, bacteria intestina y gérmenes fecales. Como la mayoría de los cepillos se guardan en los baños, están expuestos a microrganismos intestinales.
El experto Jason Tetro asegura que las cerdas empiezan a perder fuerza con el tiempo, lo qu hace que el cepillado sea menos efectivo. Hay que cambiarlo como mínimo cada tres meses por higiene y efectividad.