3 – La fuente de medusa.
En Knaresborough, una localidad del condado de North Yorkshire, en Inglaterra, existe una fuente que parece sacada directamente de la mitología.
Es un sitio donde el agua escurre por un peñasco que se parece mucho a una calavera sonriente, y donde cualquier cosa que es colocada sobre el agua se convierte en piedra.
No es tan rápido como mirar a los ojos a medusa, pero en el transcurso de tres o cinco meses, cualquier cosa que es dejada sobre el agua corriente se convierte en piedra.
Y mira que las personas han dejado todo tipo de objetos en este lugar, desde osos de peluche hasta bicicletas, y todo terminó transformado en una hermosa estatua de piedra.
Durante mucho tiempo la superstición popular suponía que la fuente había sido maldecida por una hechicera. Sin embargo, los científicos descubrieron que el agua es sumamente rica en minerales.
Como resultado, forma una costra mineral sólida sobre cualquier cosa que toca, de la misma forma en que las estalactitas se forman en las cuevas.
