No todo lo que haces en tu rutina de aseo es muy saludable. Entérate de qué errores estás cometiendo sin darte cuenta.
Tomar una ducha muy larga
Aunque parezca relajante y divertido, las duchas muy prolongadas pueden hacer que la piel pierda hidratación, por ello es posible que después de un baño demasiado largo te pique o se te reseque. Lo recomendable es no exceder los 10 minutos.