La esponja de baño
Encargada de retirar nuestra piel muerta y la suciedad, la esponja de baño también permanece mojada y/o en ambientes húmedos, donde los microorganismos y el moho crecen con facilidad. Tal vez te sorprendas pero, por esa razón y para evitar esparcirlo por nuestro cuerpo, debemos cambiar de esponja cada 3 semanas.